La CGT opositora liderada por Hugo Moyano analizará este martes continuar con el "plan de lucha", aunque esa decisión estará condicionada a lo que decida el plenario de secretarios generales de las regionales. La central convocó para ese día a un plenario de delegaciones regionales y señaló se descuenta que el plenario ratificará la voluntad de continuar con el plan de lucha aprobado en Mar del Plata. El secretario de Interior de esa CGT, Gerónimo Venegas, consideró seguirán "reclamando por los ocho puntos que habíamos fijado, pero son las delegaciones regionales las que van a decidir si seguimos con el plan de lucha, porque hicimos paros y movilizaciones y este gobierno se caracteriza por pasar por alto los pedidos de los trabajadores". El sindicalista, secretario general de la Unión de Trabajadores Rurales (UATRE), advirtió el ministro de Economía, Axel Kicillof, es el "(Domingo) Cavallo del siglo XXI", y alertó que los recientes cambios en el Banco Central "no sirven para nada". "Lo que tiene que cambiar son las políticas, implementar políticas de Estado, que mejoren la producción, la industria, el valor agregado, que son los problemas de la gente y también la rentabilidad de las empresas para que podamos tener mejores salarios", dijo en diálogo con la agencia Noticias Argentinas. Venegas reclamó "cambiar los planes sociales por salarios dignos" y consideró "inexplicable" que el país "tenga hoy 15 millones de pobres y 6 millones de indigentes, en una nación que tiene un potencial tremendo y no debería estar en esta situación". Afirmó que la administración de Cristina Kirchner "se la pasa hablando de los fondos buitres externos, pero no dice nada de los internos, que están en el propio gobierno, y mantienen haberes de hambre para los jubilados, el Impuesto a las Ganancias a los asalariados y una inflación galopante que empobrece y deteriora el poder adquisitivo de los trabajadores". "Si no hay rentabilidad empresaria, no hay fuentes de trabajo con salarios dignos, y si no hay salarios dignos no hay consumo, el mercado interno se paraliza y con eso están llegando los despidos y las miles de suspensiones", dijo el dirigente. Venegas criticó al Ministerio de Trabajo conducido por Carlos Tomada, porque "sigue sin homologar el aumento del 35 por ciento conseguido para los trabajadores rurales que les otorga un salario mínimo de 6.000 pesos más casa y comida". "Espero que cuanto antes se convoque a la comisión de trabajo agrario para autorizar este aumento acordado con las cámaras patronales", reclamó el sindicalista.