Por: Agencia SITIO GREMIAL

La Confederación Democrática de Trabajadores de la Industria de la Alimentación (CONTAC), de Brasil, denunció arbitrariedades y despidos que afectan a trabajadores de la carne del frigorífico de Marfrig Várzea Grande.

CONTAC informó que la transnacional cárnica, una de las grandes empresas que operan en la ciudad de Várzea Grande, en el Estado de Mato Grosso, ha cometido “una serie de arbitrariedades y despidos” contra sus trabajadores, publicó la Regional de la UITA.

El abogado de la Confederación, Evandro Navarro, indicó que a partir de algunos atropellos perpetrados por Marfrig, comenzó una serie de medidas de protestas con paro de actividades los días 24 y 25 de este mes, luego de que la empresa ignorara las demandas presentadas por los trabajadores.

En ese marco, CONTAC relató que “en un acto de total intransigencia”, la empresa formuló una propuesta de acuerdo en medio de las protestas que fue firmemente rechazada por los trabajadores.

A pesar de ello, Marfrig consideró “que la mayoría de la plantilla había aprobado el acuerdo y les cerró las puertas”.

Los trabajadores que aseguraron no haber sido atendidos por el sindicato que opera en la empresa y que acudieron a la Confederación en búsqueda de asesoramiento y respaldo.

En ese sentido, Josimar Cecchin, recientemente electo presidente de la CONTAC, remarcó que el sindicato de la empresa “es afín a los intereses de la compañía y contrariamente a lo que definió la mayoría, firmó un acuerdo con un incremento salarial pírrico”.

Por ese motivo, los trabajadores llevaron adelante la medida de fuerza sin el aval del sindicato “por no estar de acuerdo con lo firmado”.

LOS RECLAMOS

Los reclamos se centran en que la empresa aplica descuentos en los sueldos a trabajadores que no pueden cumplir con sus tareas debido a haber sufrido lesiones que les impiden trabajar, a pesar de que han presentado los certificados médicos correspondientes.

Asimismo, CONTAC denunció que la empresa “no proporciona equipos de protección personal (EPP)”, que “el ritmo de trabajo y las jornadas son extenuantes”, además de que “los mandos medios dan cátedra en acoso moral”.

“El paro fue la forma legítima que estos trabajadores y trabajadoras encontraron para hacerse escuchar”, remarcó Navarro, quien además sostuvo que no le permitieron el ingreso a la empresa durante los días de paro para acompañar a los trabajadores en una reunión con la gerencia.

“Sólo ingresaron cinco compañeros (comisión negociadora) y la administración local no sólo no tuvo en cuenta las demandas presentadas, sino que además amenazó con descontar los días de paro y también con despedir a los que habían participado de la medida de fuerza”, expresó Navarro.

Finalmente, este miércoles 26, las amenazas se concretaron en el despido de los trabajadores que conformaban la comisión negociadora alegando justa causa.

Por ello, la CONTAC tramitó una denuncia ante el Ministerio Público de Trabajo para revertir los despidos y “frenar las irregularidades y atropellos de Marfrig”.

Ante la situación, el asesor legal aseveró que Marfrig Várzea Grande emplea “a muchas mujeres, en su mayoría jefas de familia y a muchos migrantes, principalmente venezolanos”.

En ese marco, cuando se efectúan los descuentos en los jornales “por no poder trabajar por alguna lesión derivada del ritmo intenso de trabajo o de la sobrecarga, estas familias se ven considerablemente afectadas”.