miércoles 19 de junio de 2024 - Edición Nº2023

Docentes | 14 ago 2023

ELECCIONES

AGMER: “Lo que sucederá en las urnas será una confrontación ideológica”

La Asociación Gremial del Magisterio de Entre Ríos (AGMER) se pronunció en vísperas de las elecciones PASO de este domingo en el país y la provincia, al señalar que “lo que sucederá en las urnas será una confrontación ideológica”.


Por: Agencia SITIO GREMIAL

La Asociación Gremial del Magisterio de Entre Ríos (AGMER) se pronunció en vísperas de las elecciones PASO de este domingo en el país y la provincia, al señalar que “lo que sucederá en las urnas será una confrontación ideológica”.

En un documento difundido previo a las elecciones PASO de este domingo, la entidad gremial dirigió un mensaje a los docentes entrerrianos.

El gremio aclaró que jamás le dirán a los docentes “qué partido, alianza o frente electoral votar”, ya que no les corresponde hacerlo debido a que “es un acto individual” y al ratificar el principio que establece su estatuto de “autonomía de los partidos y de las patronales”.

No obstante, AGMER afirmó que “lo que sucederá en estos días en las urnas será una confrontación ideológica”. Dejó en claro, además, que esa disputa es “por dos modelos de sociedad antagónicos”.

La entidad manifestó que uno de esos modelos “pretende una sociedad dominada por el mercado como regulador de las relaciones sociales, de la mano del capital financiero, los medios de comunicación hegemónicos y la corporación judicial”.

“Su manual de procedimientos es muy claro y básico (sus candidatos hasta lo dicen públicamente): mayor endeudamiento externo, un feroz ajuste a los trabajadores, recortes presupuestarios en educación, salud y seguridad social, reducción del Estado a la mínima expresión posible, avance del proceso privatizador sobre empresas nacionales, sobre las universidades y la educación pública, flexibilización laboral, reforma jubilatoria, intervención de las organizaciones sociales y de los sindicatos que no se arrodillen, represión, persecución y criminalización de la protesta social”, expuso el gremio.

Asimismo, AGMER aseveró que a esos propósitos “ya lo han intentado y lo han hecho”, y señaló que ahora “recargados, se aprestan a regresar para concluir con esa agenda altamente nociva para las trabajadores y trabajadores y para las clases populares y medias de este país”.

DOS MODELOS

En ese sentido, para AGMER ese modelo en Entre Ríos se enfoca en cuestiones puntuales. Mencionó, precisamente, la reforma de la ley previsional 8.732; la declaración de la educación como un servicio “para llevarse puesto el derecho de huelga, amenaza con extender jornadas de clase los sábados, atacar el régimen de licencias e inasistencias, instalación de la cultura del pago por presentismo, desacreditar mediáticamente el trabajo docente, derogación del Estatuto del Docente Entrerriano, regreso de las políticas de gerenciamiento de la institución escolar para luego avanzar en procesos privatizadores en educación, ofensiva contra la estabilidad docente (precarización laboral) intervención o disciplinamiento de la obra social (desfinanciándola previamente) y volver a privatizar los servicios eléctricos”.

Advirtió también el sindicato, que otro de los objetivos de ese modelo sería la “persecución, sanción y castigo (con las pertinentes campañas de desprestigio en las que son expertos) hacia todos y todas quienes se movilicen. Llana y directamente un escenario de alarmante pérdida de derechos”. 

Más precisamente, el gremio identificó después a ese modelo de sociedad que, según afirmó, está “encarnado en cada expresión de derecha, neoliberal y conservadora” que constituye para ese sindicato “una derrota inmediata para cada trabajador y trabajadora, para nuestras familias, las familias de nuestros alumnos y alumnas. Un retroceso en años sobre derechos conquistados tanto para los sectores populares y medios de nuestra sociedad”.

En cambio, AGMER dejó en claro que impulsa otro modelo de país “profundamente democrático y a favor de las grandes mayorías, en donde la distribución de la riqueza sea sobre la base de mayor justicia y equidad social”. Así, entendió que el Estado debe ser un “activo mediador entre el capital (el mercado) y el mundo del trabajo”, que “promueva y resguarde derechos, sostenga las convenciones colectivas de trabajo, que defienda los bienes naturales comunes energéticos y estratégicos, que defienda la producción nacional, que fortalezca las universidades y la escuela pública, al igual que la salud y la seguridad social, que fomente el empleo genuino y dignifique salarialmente a cada trabajador y trabajadora. Que, en definitiva, elimine definitivamente la pobreza en este país”.

Por otra parte, la entidad señaló que para esos “escenarios como los que vendrán” han preparado su organización sindical. Indicó además que las declaraciones que han sostenido para mantener la unidad interna “no es azarosa”, para poner “el objeto de confrontación afuera de AGMER, al llamado permanente de respetarnos aún en las diferencias, para nosotros y para toda la clase trabajadora”.

Asimismo, el sindicato resaltó además que ese esfuerzo se evidencia actualmente “en los distintos procesos de lucha” que llevan adelante “muy lejos de las internas y cruces mediáticos de otros tiempos”. Aseveró que “la interna de AGMER ya no es noticia, sí sus frentes de disputas y conquistas”. De esa manera, esa “tranquilidad hacia adentro, la confianza que nos tenemos aun no pensando del mismo modo”, será “el combustible que necesitamos para enfrentar al modelo del mercado y del capital financiero. Esta es nuestra fortaleza y refugio de nuestro cuerpo de derechos”, enfatizó.

EL CONTEXTO

Al trazar un panorama sobre la realidad social, económica y política del país y la provincia, AGMER destacó el aniversario de los 40 años de democracia y mencionó “un pueblo lastimado por el centralismo porteño, los gobiernos oligárquicos y conservadores, la sucesión de dictaduras, el terrorismo de Estado, el asesinato y desaparición de compatriotas, los levantamientos militares registrados ya en democracia, las privatizaciones de empresas públicas, el desempleo, la pobreza y la exclusión producto de las políticas neoliberales, el endeudamiento externo, el estallido social de 2001, las y los compatriotas asesinados y asesinadas en esas jornadas, la persecución y desaparición de ciudadanos, sumados a los presos políticos de 2016 hasta el día de hoy, la feroz persecución-represión en Jujuy. Esta democracia es la que rescatamos de la más feroz y sangrienta de todas las dictaduras que hemos padecido. De ese implacable infierno, frente a tanta desolación, las manos del pueblo la devolvieron una y otra vez”.

La organización gremial también repudió “las represiones contra las luchas docentes, el asesinato del maestro Carlos Fuentealba, la judicialización contra compañeros docentes y la muerte en una escuela de Sandra y Rubén en la provincia de Buenos Aires por la negligencia de las políticas neoliberales, la memoria por Isauro Arancibia, Eduardo Requena y Marina Vilte junto a los casi 700 docentes desaparecidos por el terrorismo de Estado”.

AGMER afirmó en ese sentido que “esta democracia nos duele”, por “las heridas que nos dejan las injusticias”, y enumeró: “La pobreza y la indigencia, nuestros adultos mayores viviendo en la calle, nuestros pibes y pibas explotados -abusados- fuera de la escuela, nos recuerdan cada día que comienza las tareas que todavía nos faltan por hacer, o terminar. Porque mientras los dueños del poder paseen grotescamente sus privilegios usurpados, la democracia adolecerá de justicia. Con hambre no habrá democracia plena, con pérdida de derechos tampoco”. Señaló posteriormente que desde ese lugar observa “la coyuntura electoral que se aproxima”.

Más adelante, el sindicato dejó en claro que son conscientes de “la enorme responsabilidad de representar a miles de docentes entrerrianas y entrerrianos organizados en AGMER”, ya que esa organización “de tanta fuerza y prestigio” contiene “una enorme diversidad y pluralidad de miradas y pensamientos”, lo que le da “una peculiar identidad como entidad sindical”.

En ese marco, la dirigencia gremial hizo hincapié: “Esta Conducción Directiva Central tiene muy claro ese sentido de pertenencia. Entendemos, además, que cuando el/la docente con su voto nos puso en este lugar, lo hizo para que disputemos cada punto de una extensa agenda (lo salarial, lo técnico-profesional, condiciones y salud laboral, etcétera). Defender la vigencia y continuidad de derechos, alcanzar y conquistar nuevos, ese es el mandato central. Pero también pesa en nuestras espaldas la responsabilidad de leer la realidad, interpretarla y advertir lo que puede estar por llegar. La responsabilidad en este punto es profundamente ética, de lealtad frente a las afiliadas y afiliados. Aquí, no advertir lo que puede suceder, guardar silencio frente a posibles riesgos escondiéndose en especulaciones banales constituye, para nosotros y nosotras –integrantes de esta CDC de AGMER- una falta ética grave que traicionaría el mandato soberano de nuestras compañeras y compañeros. Preferimos mil veces el riesgo de exponernos que la deslealtad hacia las trabajadoras y trabajadores”, concluyó.

 

OPINÁ, DEJÁ TU COMENTARIO:
Más Noticias

NEWSLETTER

Suscríbase a nuestro boletín de noticias