Sindicatos entrerrianos colaborarán con el control de precios en la provincia. Lo harán en respuesta a un pedido del gobierno provincial. Así lo acordaron este viernes en una reunión que mantuvieron dirigentes gremiales con funcionarios del Poder Ejecutivo. “Se acordó un programa que para los sindicatos es muy importante. Es un programa de control de precios por un año”, confirmó a SITIO GREMIAL tras el encuentro el secretario General del Sindicato de Empleados de Comercio de Paraná, Daniel Ruberto. La reunión, que se desarrolló en la Casa de Gobierno, estuvo encabezada por los ministros de Comunicación y Cultura, Pedro Báez; de la Producción, Roberto Schunk; de Trabajo, Guillermo Smaldone; y por el director de Defensa al Consumidor, Juan Carlos Albornoz. Ruberto indicó que durante el encuentro “el gobierno informó cuáles son las exigencias que tienen los comercios y todos los sindicatos de la provincia manifestaron el compromiso de colaborar con este programa”. “Estamos cerca de discutir paritarias y para nosotros es fundamental tener una pauta de cuánto va a costar la canasta familiar fundamentalmente”, destacó Ruberto sobre la importancia del acuerdo. El titular del Sindicato de Comercio paranaense indicó que el control de precios se ejecuta “con un acto formal de parte del gobierno a través de sus inspectores” y que “los sindicatos vamos a colaborar por los distintos medios a través de nuestro conocimiento”. “Los trabajadores están en los distintos tramos de la cadena. Nosotros los empleados de Comercio estamos en la venta al público, otros están en el transporte, otros en el almacenamiento, otros en la producción. Entonces el gobierno a través de los sindicatos puede conocer donde hay una transgresión en la formación de precios”, detalló Ruberto. De la reunión que se desarrolló este viernes participaron los sindicatos de la carne, de pasteleros, de personal civil de las fuerzas armadas, de televisión, de la sanidad, de entidades deportivas, de Luz y Fuerza, de docentes privados, de metalúrgicos, de empleados de comercio, de mecánicos, de trabajadores del Iosper, de trabajadores de casas particulares, de edificios, de prensa, de obreros de la construcción, de no docentes de la UNER y de molineros. Pedro Comas, secretario general de la Unión Trabajadores de Entidades Deportivas y Civiles (Utedyc), señaló que su gremio cuenta con “herramientas para colaborar con la defensa del salario y el control de los precios” y añadió: “Ponemos a disposición a la juventud sindical con cuyos representantes nos reunimos y están para sumarse”. Pidió luego “ponerse de acuerdo en la faz operativa” y propuso la emisión de una credencial identificatoria para los voluntarios que participen de las distintas acciones. “Del mismo modo que cuando hacemos una vivienda y conseguimos que un trabajador deje de pagar alquiler, queremos ayudar para cuidar el salario y de nuestra gente”, acotó. Sergio Pesoa, secretario de Interior del Sindicato Argentino de Docentes Privados (Sadop) añadió que “hay que trabajar para que el consumidor sea el primer defensor de su bolsillo” y advirtió: “Nuestros afiliados están en todas las escuelas y tienen acceso a un montón de familias. Somos una herramienta útil para hacer cumplir este programa y que no se pierda lo que podamos lograr en las mesas paritarias”. Cristina Juri, representante de los trabajadores del Iosper, dijo que le parece “perfecto que todos salgan a defender este programa”. En tanto Juan González, del gremio de Pasteleros, manifestó que “el Estado debe saber que tiene de su lado a los trabajadores para resistir los embates de las corporaciones”. Walter Corrado, de Luz y Fuerza, consideró la conducta del empresariado en relación a los precios como “un ataque a la sociedad en su conjunto” y llamó a la dirigencia a “superar diferencias, alcanzar madurez e involucrarnos todo el movimiento obrero para garantizar la paz social y sumarnos a esta lucha común en defensa de los trabajadores”.  En tanto Walter Doronzoro, de la Unión de Obreros de la Construcción de la República Argentina (Uocra), definió: “Esto es una puja de poder. Es el poder económico que quiere tumbar al poder político. De eso se trata. Nosotros estamos a disposición de este proyecto que defiende a los trabajadores y somos los primeros en sumarnos. En nuestra actividad, si hay problemas con los precios cesan los trabajos, se reducen las horas y vienen los despidos. Por eso también tomamos posición clara, ya que cuando avanzan contra este modelo, avanzan contra nosotros”.